La actividad minera continúa cosechando críticas y rechazos en la provincia de Buenos Aires. Al revés judicial obtenido en Sierra de la Ventana, que bloqueó la potencial extracción de oro en los cordones de esa comarca turística, ahora se suma la decisión de Tandil –considerado el principal punto minero del territorio bonaerense– de avanzar con la erradicación de las empresas que hoy explotan rocas de aplicación en esa ciudad.
La medida en cuestión resulta impulsada por Miguel Lunghi, intendente de Tandil, pero también cuenta con el apoyo de la administración provincial que lidera Daniel Scioli. En esa dirección, Ignacio Crotto, subsecretario de Turismo bonaerense, se pronunció a favor de la sanción de una ley que “frene por completo la actividad minera” en el sistema de Tandilia.
“La explotación de rocas en las sierras hoy representa apenas el 1% del PBI de la ciudad, mientras que la actividad turística alcanza al 10% y en ascenso. En virtud de eso, preferimos proteger nuestro patrimonio natural en lugar de dejar que borren a los cerros”, explicó Lunghi a iProfesional.com.
En el marco de la 1° Bienal de Turismo celebrada en Tandil, el funcionario adelantó a este medio que planea poner en marcha un plebiscito a fin de acelerar los tiempos “y así adelantar cuanto antes el cese de actividades mineras”.
“Vamos por la consulta popular. Tenemos un proyecto de ley que ya está consensuado con el Gobierno. A partir de ahí podremos erradicar las cuatro canteras que, por sus continuas explosiones, ponen en riesgo incluso la vida de los habitantes de esta ciudad”, dijo.
Con relación a la identidad de las empresas que se verían alcanzadas por la medida, Lunghi mencionó a las firmas “Carba, Minera Tandil, Montecristo y Equimac”. “No son compañías que pertenezcan a capitales de la ciudad y el final de sus actividades sólo afectará a 65 puestos de trabajo”, aclaró el Intendente.
Y añadió: “Una vez aprobada la ley que estamos impulsando, las empresas deberán aceptar un control impuesto para luego entrar en una fase de reconversión. Al año de iniciado ese proceso caducarán todas las operaciones de minería”.
Tanto Carba como las firmas Minera Tandil, Montecristo y Equimac se dedican a la extracción de rocas que luego son destinadas a actividades vinculadas con la obra pública. Tandil se caracteriza por contar con amplias reservas de lajas y granito.
“Las mineras han hecho un desastre. Por eso le pedimos a Scioli que frene la explotación. No puede ser que esté habilitada la extracción en la poligonal que establece los límites de la ciudad. Lamentablemente el freno a eso sólo lo puede decir el gobierno provincial y no el municipio”, aseguró Lunghi.
Apoyo instantáneo
Los dichos de Lunghi encontraron rápido apoyo en la opinión de Ignacio Crotto, subsecretario de Turismo bonaerense. Presente también en la 1° Bienal de Turismo, el funcionario remarcó que la gobernación “apoya la ley que frenará la minería” en Tandil.
Y aseguró que la normativa podría ser aprobada antes de las próximas elecciones. “Es necesario proteger a la sierras. Sobre todo, por lo que representan para la provincia. No nos olvidemos que el territorio bonaerense hoy mueve más del 40% del turismo nacional”, confió.
El rechazo a la explotación minera en Tandil viene a sumarse a lo expuesto por distintas organizaciones ambientalistas en la Comarca Turística de Sierra de la Ventana.
En esa zona del sur bonaerense un grupo de empresas comenzó a monitorear, hace algunos años, la potencial existencia de reservas de oro.
Resolución
Ya entre 2006 y 2007 el Ministerio de la Producción de la provincia de Buenos Aires fijó una resolución que declaraba a un sector del sistema de Ventania como “área de explotación minera”.
Tras una serie de presentaciones y recursos extendidos a la Justicia Federal, las organizaciones ambientalistas de Sierra de la Ventana lograron que se impida la realización de nuevas tareas de exploración.
Al respecto, Lunghi no descartó establecer algún tipo de vínculo con representantes de Ventana a fin de conocer de cerca la estrategia que bloqueó la extracción de metales preciosos.
“No dejamos afuera ninguna alternativa o posibilidad. La minería fue importante para nuestra ciudad en un momento, pero ahora las cosas cambiaron”, sostuvo.
Y agregó: “Es cierto que Tandil tiene tradición y es el centro minero de la provincia por excelencia, pero la ciudad creció tanto que ahora las canteras están dentro del casco urbano. Y eso implica un riesgo demasiado alto para los planes que tenemos a futuro”, concluyó.
Patricio Eleisegui
Enviado especial a Tandil
© iProfesional.com
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